Queridos amigos de madridlogopedia, hoy os traemos una información que siempre puede ser útil, esperamos que sea de vuestro interés.

La Asociación Española de Pediatría ha publicado unos interesantes consejos para prevenir accidentes en niños de 2 a seis años. Como ya sabéis a lo largo de esta edad los niños desarrollan y perfeccionan la marcha (cuando no lo han hecho antes) y por tanto adquieren una cierta independencia de movimientos y posibilidades de manipulación que implican tener una cierta prudencia, como bien sabéis.

Estos consejos, realizados por pediatras, que son los que atienden a nuestros hijos después de los accidentes son muy de sentido común, pero siempre conviene echarles un vistazo por si no se nos había ocurrido algo de lo que podría pasar. También es útil que los conozcan las personas que están al cuidado de nuestros hijos.

  • Las terrazas y los balcones deben tener barandillas altas a las que los niños no deben trepar.
  • Las puertas de las casas han de permanecer cerradas, de modo que el niño no pueda abrirlas fácilmente.
  • Las ventanas de las habitaciones deben tener un cierre de seguridad o disponer de barandillas o rejas, al menos en los cuartos de los niños.
  • Sea consciente de que los niños pueden trepar por las plantas o las cajoneras colocadas en las terrazas.
  • Los niños pequeños nunca deben utilizar el ascensor sin ir acompañados de un adulto.
  • Vigile el hueco de la escalera. Proteja el acceso para así evitar que los niños se precipiten por él .
  • No deje que los niños corran o se peleen en habitaciones donde hay estufas eléctricas, de butano u otros gases.
  • Procure que los niños en la calle jueguen en lugares seguros.
  • La mejor enseñanza para su hijo es el ejemplo. Nunca infrinja las normas de seguridad vial cuando pasee o viaje con sus hijos.
  • Enséñele pronto a cruzar las calles y a usar los semáforos.
  • En el coche, los menores de 12 años deben ir siempre sujetos con sistemas de retención adecuados a su edad y peso.
  • Enséñele a nadar cuanto antes.
  • No deje que se acerque a animales desconocidos y enséñele a tener precaución con su propio perro o animal doméstico.
  • No se deberían dar al niño frutos secos o alimentos que puedan provocar atragantamiento hasta que el niño tenga 4 o 5 años.

Todos estos consejos son de la mayor utilidad como podéis ver, en cualquier caso la mejor herramienta es el sentido común y la prudencia, ya que tampoco es bueno estar excesivamente angustiado por seguir estos consejos.

Como ya sabéis estos consejos no sustituyen al pediatra, así que si tenéis dudas o necesitáis alguna aclaración no dudéis en poneros en contacto con el médico de vuestros hijos.